Antes de empezar voy a aclararos alguno de los nombres por los que me he hecho llamar (como ya dije en mi primera entrada), lo de BUN viene por un nombre que tuve en Twitter durante un tiempo y, para quien no lo sepa, significa moño en ingles (adorooooo los moños).
Después de esta aclaración, vamos con lo que os traigo hoy, manos a la masa...
Ingredientes
- 80 gr. de chocolate negro, en trozos
- 80 gr. de chocolate con leche, en trozos
- 80 gr. de chocolate blanco, en trozos
- 350 gr. de harina de repostería
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 80 gr. de azúcar
- 80 gr. de azúcar moreno
- 180 gr. de mantequilla
- 1 huevo
- 1 yema de huevo
Ponemos todos los chocolates en un bol y los partimos en trozos muy pequeños con la ayuda de un vaso, también podemos utilizar una picadora o cualquier aparato similar. Reservamos estos trozos en la nevera.
Ponemos la harina, el bicarbonato, el azúcar, el azúcar moreno, la mantequilla, el huevo, la yema y los chocolates reservados. Amasamos muy bien hasta tener una masa consistente pero que no se desmigaje, si esto pasa añadir un poquito de leche
Retiramos la masa del bol y la colocamos sobre papel film. Con las manos amasamos y hacemos un rulo según queramos las galletas de grandes. Lo envolvemos en el papel film y dejamos reposar en el frigorífico durante 45 minutos.
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Precalentamos el horno a 180º y colocamos papel de hornear sobre una bandeja de horno.
Sacamos el rulo del frigorífico, quitamos el papel film y cortamos medallones de más o menos 1 cm de grosor. Los colocamos sobre el papel de hornear, separados unos de otros.
Horneamos durante 15 minutos, a 180º (el tiempo dependerá de nuestro horno y el tamaño de las cookies.
Retiramos del horno, dejamos reposar unos minutos en la misma bandeja, para que endurezcan y ponemos las galletas sobre una rejilla hasta que enfríen completamente.
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